Expresar en pocas palabras qué es la raza quizás sea fácil. No lo es tanto buscar la razón de la sinrazón, explicar las consecuencias a que históricamente ha dado lugar la utilización de dicho concepto con fines interesados de legitimación del poder y exclusión social, delimitar qué es el racismo. Hacerlo supone hablar de marginación y discriminación, nazis y judíos, minorías étnicas (negros, chicanos, magrebíes, gitanos, indios...), pobreza, inmigración, xenofobia; implica reflexionar acerca del silencio y el olvido, recuperar identidades y memorias, escribir la Historia desde sus márgenes, luchar contra exilios interiores, soledades y derrotas, soñar con un mundo multicultural y solidario, apostar por la paz. Esta es la finalidad del presente trabajo, cuya segunda parte verá la luz el próximo número de Baetica.