En la remodelación del robot móvil Auriga-a, desarrollado en el año 2000, solo se ha conservado su sistema de locomoción. Además de la actualización de los sistemas informáticos y equipos de control, el principal objetivo ha sido la conversión del robot en un vehículo híbrido eléctrico. Para ello, se han incorporado baterías LiFePO4 con su correspondiente cargador y un generador monofásico. En el diseño, se han tenido en cuenta el posicionado del centro de gravedad y la ventilación de los equipos. En conjunto, la remodelación consigue reducir la masa del vehículo y mejorar su eficiencia y autonomía energética. En la actualidad, el diseño está siendo implantado en el robot real.