La idea fundamental para Sáenz de Oíza estriba en proponer un modelo de ciudad y de relación de ésta con la vivienda, utilizando modelos y conceptos de la modernidad conciliados con conceptos urbanos históricos.
Propone una obra completamente abierta, un método de crecimiento, una estructura de generación urbana más que una imagen de ciudad, un proceso fluido de conformación urbana en el que la relación de los espacios vacíos y llenos de la ciudad propuesta y la ciudad por venir configuraran un lugar fenomenológico. En ese lugar
los habitantes del Pozo de Entrevías habrían de desarrollar sus vidas.
La propuesta en Entrevías es una experimentación proyectual, en la que el proyecto es producto de ese proceso de análisis fenomenológico de la realidad arquitectónica que intenta definir.
Esta forma de abordar el proyecto de arquitectura, con todas las interrogantes abiertas, constituirá por extensión su personal y propedéutico quehacer arquitectónico y se convertirá en uno de sus legados más importantes como arquitecto y como maestro.