La psicología cognitiva defiende la idea de que para explicar el proceso de aprendizaje del alumno hay que tener en cuenta tanto las variables cognitivas como las motivacionales. Los alumnos que experimentan sentimientos de autonomía tienden a buscar retos, a perseverar en las tareas difíciles, a rendir más y a realizar trabajos de mayor calidad que los alumnos controlados por el profesor. Asimismo, resulta de gran utilidad emplear los errores para evaluar el "proceso" del rendimiento del alumno en vez del "producto".
En este artículo nos mostramos diferentes procedimientos de evaluación que forman parte de la metodología de la enseñanza de interpretación consecutiva como elemento clave en la motivación del alumno.