Las operaciones computacionales a distancia, incluyendo el almacenamiento, el procesamiento y la distribución de información y comunicación empezaron a generalizarse en la última década del siglo pasado en entornos empresariales y corporativos. Sin embargo, su uso se ha extendido como un servicio fundamental en las aplicaciones web más recientes, como práctica habitual de cualquier usuario actual de Internet. Fuertemente
imbricadas con las experiencias comunicativas de la red, se encuentran a su vez transformando el uso de la tecnología informática, basada ahora en parámetros como máxima movilidad, mayor ligereza en los equipos, simultaneidad en la comunicación y
creación de miniaplicaciones ad hoc, entre otras. El presente texto describe algunos de los
más relevantes rasgos comunicativos del cloud computing, así como de sus usos sociales.
Entre ellos, la ruptura de los conceptos tradicionales de espacio, tiempo, y la construcción de la identidad.