La información se ha convertido en las últimas décadas en un bien de incalculable valor para las personas, tanto físicas como jurídicas. La gravedad de los ataques a la información viene dada por la multitud de bienes jurídicos a los que aquellos afectan. La intimidad, el patrimonio, la libertad sexual, la seguridad nacional, la propiedad intelectual e industrial, son solo algunos de los objetos de tutela cuya violación puede producirse a partir de un ataque a sistemas de información que contengan datos relacionados con estos bienes.
En el presente trabajo se abordará, en primer lugar, cuáles han sido algunas de las medidas que desde la Unión Europea se han adoptado para luchar contra los ataques a la ciberseguridad. En segundo lugar, se estudiará la regulación de algunos de los aspectos penales más destacados, como son las conductas típicas, el tipo subjetivo de estas figuras delictivas y sus consecuencias penológicas. Y, en tercer lugar, se aportarán algunos datos relativos a este fenómeno delictivo para poner de manifiesto cuál es la situación actual en España respecto a la ciberdelincuencia y, en concreto, a los delitos informáticos.