Uno de los componentes esenciales del proceso de aprendizaje en la etapa universitaria, especialmente en disciplinas tan complejas y multifacéticas como el Derecho, es la tutorización. Esta práctica de orientación no solo facilita la comprensión y el dominio de los contenidos académicos, sino que también desempeña un papel crucial en la formación integral de los estudiantes, apoyándolos en su desarrollo personal y profesional.
Pero para que la práctica de tutorización alcance resultados satisfactorios es preciso tener en cuenta que las interacciones docente-estudiante no están exentas de dinámicas de poder y expectativas sociales que se entrelazan con el género. Esa intersección entre género y tutorización en el contexto universitario es la que se aborda en el presente capítulo. En particular, se examina cómo las desigualdades de género se manifiestan en la tutorización de los estudiantes, y cómo estas pueden repercutir en el éxito académico y la retención estudiantil. Además, se analizan las estrategias y enfoques innovadores que pueden promover una tutorización más inclusiva y equitativa para todo el alumnado, al margen de su identidad de género. A través de un análisis crítico y reflexivo, se busca no solo identificar los desafíos existentes, sino también abrir el espacio para la exploración de soluciones efectivas y sostenibles.