El modelo andaluz de diálogo social ha constituido la matriz del Sistema Extrajudicial de
Resolución de Conflictos Laborales de Andalucía, siendo por tanto dicho modelo una
referencia del Sistema, a cuyo sostenimiento también contribuye. También en cuanto a
la implantación institucional del Sistema ha tenido y tiene, además, un fuerte apoyo por
parte del Consejo Andaluz de Relaciones Laborales que, pensado como centro de diálogo
permanente, impulsa tanto la negociación colectiva como la resolución extrajudicial de
conflictos. Por lo que la ampliación del ámbito del Sistema a los conflictos individuales,
con una adaptación del Reglamento aplicable, ha supuesto para los mismos un instrumento
institucional idóneo. Gracias a dicho apoyo institucional los procedimientos de resolución
de conflictos individuales cuentan con medios que intentan asegurar un clima de confianza,
tanto en la posibilidad de lograr un acuerdo, como en la eficacia del mismo una vez alcanzado.
Respecto a los planteamientos de conflictos individuales ante el SERCLA se comprueba que
existe una mayor dosis de voluntariedad en comparación con la tramitación de la conciliación
administrativa. Hay también un alto grado de confianza de las partes en el Sistema, a tenor
de la cuota de comparecencias. Analizando los factores que pueden influir en la consecución
del acuerdo se observa la posibilidad de mejoría, sobre todo respecto de algunos factores de
carácter subjetivo. Ello requeriría un estudio más específico.