El presente trabajo pretende adentrarse en una cuestión que, a la luz de la solicitud de una opinión consultiva a la Corte Internacional de Justicia sobre las obligaciones de los Estados con respecto al cambio climático (A/RES/77/276) en abril de 2023, cobra un elevado protagonismo. Esta contribución trata de acercarse a las diversas ocasiones en las que este máximo órgano judicial del contexto de Naciones Unidas ha llevado a cabo pronunciamientos -unos más acertados que otros- en los que el tema de la protección del medio ambiente ha salido a relucir. La pregunta con la que se titula este capítulo es precisamente si se ha hecho demasiado poco, y/o demasiado lento, así como qué cabe esperar del ansiado dictamen que la Corte habrá de emitir en un futuro no muy lejano.