Nos enfrentamos a una época de cambio de paradigma, en el cual el rol de la Unión Europea puede ser relevante, convirtiendo en oportunidades los retos que afronta: el Brexit, los populismos, el proteccionismo, la inmigración, la lucha contra la desigualad y el cambio climático, entre otras.
El dinero y el poder siempre están interrelacionados en un mundo de economía globalizada. Todo lo que estamos viendo y viviendo afecta y afectará a las personas, pues no debemos olvidar que detrás de las corporaciones empresariales hay personas. La ciudadanía es la última receptora de cualquier actuación estatal o empresarial.
En cualquier caso, todo acercamiento económico y socio- político sobre el poder y el dinero debe considerar un terreno de juego: el sistema financiero internacional.