La teoría de la creatividad dentro de las tendencias artísticas que se hang producido durante los
últimos veinte años ha convertido en términos expresivos el desafío y el derecho a la diversidad. La
producción artística actual, de hecho, más que estar ubicada en espacios claros y discernibles, se
desplaza hoy en un nuevo campo expandido que permite un despliegue de factores que cruzan con
muchas variables como la identidad, la raza, los géneros o los tipos de comunidad multicultural. En
este contexto, la figura del artista nómada contemporáneo asegura un movimiento de reescritura cuya
palabra clave es no tanto creación, sino con-creación con la que remodelar los territorios, traducir
las culturas, educar las conciencias e imponer nuevas cartografías que harían de cada tierra firme un
archipiélago.