El Big Data ha atraído la atención de investigadores y académicos, no obstante, aun requiere mayor disposición para que se adopten. Estamos ante la oportunidad de desarrollar nuevas herramientas y metodologías, de no quedarnos anclados en las herramientas y metodologías tradicionales que hasta el momento se han utilizado para analizar la realidad social. Es necesario encontrar los mejores medios para analizar estos nuevos datos que están a nuestro alcance, para así poder comprender mejor la sociedad. Los matemáticos e ingenieros están ya desarrollando estas herramientas y metodologías, sin embargo, para darle contenido al Big Data, carecen de la capacidad de diseño, análisis y comprensión de los fenómenos sociales que ofrecemos los investigadores sociales. Es el momento de una formación mucho más interdisciplinar para afrontar con garantías el reto que se nos presenta.