En las últimas décadas los países de América Latina y el Caribe han incrementado notablemente su actividad turística como otra forma de soporte a la economía, especialmente desarrollando el turismo cultural. Además de aprovechar su belleza paisajística muy diversa, la región atrae por su riqueza cultural, su historia con identidad propia, sus lenguas y sus costumbres y estilos de vida tan adversos. El patrimonio cultural que esconde es único, pero todavía está lejos de que se llegue a conocer por todo el mundo. La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) posee un rol fundamental para la valorización de los bienes al declararlos como Patrimonio de la Humanidad, así como también para su conservación. La utilización de los medios digitales en la comunicación 2.0 de un destino resulta indispensable para la difusión de estos espacios culturales y su mayor alcance a nivel mundial. Los turistas que visitan un sitio y que comparten sus experiencias de viaje a través de la web se convierten en informantes claves para quienes están planificando su próxima visita y, a su vez aportan valoraciones que ayudan a determinar la mejor o peor reputación que puede tener un espacio determinado. Con este proyecto se pretende tener, aunque sea una mínima aproximación sobre la reputación online que alcanzan los bienes culturales patrimoniales de la Humanidad de los países que integran las regiones de América Latina y el Caribe