En esta comunicación se aborda la adaptación al cine de las memorias de Vera Brittain, Testamento de juventud, a cargo de James Kent en 2014. Se estudia, entre otros recursos, el empleo de la voz over como técnica para representar la "escritura del yo" y se postula que la realización por parte de un director ha atenuado el carácter feminista de la voz testimonial de la autora.
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