El cáncer conlleva un impacto en todos los ámbitos de la vida del paciente durante intervalos prolongados de tiempo, afectando a la calidad de vida del paciente. Tanto los profesionales que trabajan con pacientes oncológicos como los mismos pacientes destacan la importancia de mejorar la calidad de vida de los pacientes como una parte más dentro de los planes de actuación con tales pacientes. El cáncer produce eventos de estrés crónico como el miedo constante a una posible recidiva de la enfermedad y una gran incertidumbre con respecto a su propia vida y su propio futuro. Del mismo modo los términos usados como "cáncer" tienen un gran impacto en la persona por la imagen que se tiene de la enfermedad. La presente Tesis tiene como objetivo analizar cómo se relacionan la resiliencia y el optimismo disposicional con el estrés y calidad de vida. Para ello se realiza un análisis multidimensional del apoyo social, diferenciando entre frecuencia de apoyo recibido y satisfacción con el apoyo, diferenciando entre tipos de apoyo (emocional, instrumental e informacional) y fuentes de apoyo (pareja, familia, amigos y personal sanitario). La muestra total de participantes está formada por 200 pacientes con diferentes tipos de cáncer. El apoyo social, el optimismo disposicional y la resiliencia tienen una relación positiva con la calidad de vida y negativa con el estrés percibido. El apoyo emocional es más relevante en la mejora de la calidad de vida del paciente. La pareja, la familia, los amigos y el personal sanitario han mostrado tener un impacto positivo en la calidad de vida. La satisfacción con el apoyo social recibido funciona mejor como predictor de la calidad de vida que la frecuencia de apoyo. Tanto la resiliencia como el optimismo disposicional predicen un aumento de la calidad de vida y reducción del estrés percibido.