Estudios relacionados con la alimentación infantil sugieren que es necesario llevar a cabo una dieta saludable y equilibrada para el correcto funcionamiento del organismo, y más aún, a edades tempranas. Sin embargo, solo el 5.17% de niños/as ingiere de 2 a 3 piezas de frutas al día. Mediante una observación directa y sistemática en el momento del desayuno en un aula de educación infantil se puede corroborar que hoy día los niños y niñas podrían excederse en el consumo de bollería industrial y dulces, siendo las frutas y las verduras las grandes olvidadas. Visto lo anterior, surge esta experiencia que comprende un proyecto de intervención didáctica que persigue cambiar los hábitos alimenticios en la etapa de Educación Infantil. El objetivo principal de este proyecto de intervención fue la adquisición de hábitos de vida saludables y alimenticios, así como el fomento del consumo de frutas en la etapa de Educación Infantil.