En el índice de esta tesis doctoral se pone de manifiesto cómo antes de abordar el análisis, la teoría y la praxis de los espectáculos folclóricos de posguerra, se ha realizado un recorrido por sus antecedentes. De ahí que con la tonadilla escénica del siglo XVIII comience esta investigación. Se presenta un corpus teatral de 67 libretos de los que hay seleccionados 12 (un minicorpus) para su estudio, partiendo de un tipo de intelección donde representar su validez no sólo como método expositivo sino también como sistema interpretativo, cuyos componentes fundamentales han sido el estudio de la estructura, el lenguaje y los personajes; tratando, asimismo, de delimitar los aspectos definitorios de su temática, con sus rasgos de estilo más elocuentes y las fórmulas que articulan estos discursos. Por ser expresión popular, no sólo se pone en valor este género, sino que se sitúa en su contexto social, y en lo emocional y afectivo, donde se aúna la poesía, la música y la escena en un proceso único e identitario, con significativos resultados dada la calidad de sus creadores. Todo ello expresado mediante una narratividad teatralizada que recoge aspectos simbólicos de lo trágico, lo dramático y lo cómico, siendo texto y pretexto de la historia en prosa o verso. Con método teórico, comparado e histórico, los estudios utilizados de poética y crítica literaria brindan un justo reconocimiento a los valores éticos y estéticos de este género popular y a la sentimentalidad inscrita en sus parlamentos. El comparatismo ha sido tratado en las correspondencias de personajes, héroes y villanos, con la clasicidad; y, asimismo, en las tramas y la configuración de los discursos, diálogos y monólogos, junto a su simbología e imaginario, y también la música en su función emotiva.