Durante el segundo semestre del curso 2019-2020, se me asignó la docencia en Derecho Civil II, gran parte de ella práctica, y, con algunas clases teóricas puntuales. La observación sobre la dificultad de captar los mensajes teóricos fue confirmada por el estudiantado, que reclamaba unas enseñanzas más cercanas. Se realizo un sencillo método de aseguramiento de la calidad, mediante evaluación de proceso: el ONE MINUTE TEST, que consiste básicamente, en realizar dos preguntas al final de clase teórica dentro del programa de Derecho Civil II, en el segundo semestre (Lección 11: La usucapión), para que se contestasen por escrito: ¿Qué has aprendido hoy? y ¿Qué no te ha quedado claro?, en cuatro subgrupos (A1, A2, B1, B2) con un N total de 137 estudiantes, de los cuales asistieron a clase, 98 (es decir, el 56,93%). A nuestros efectos, la muestra fue de n=78 estudiantes. El 100% respondió el one minute test. 70 estudiantes respondieron coherentemente a lo explicado como lo que habían aprendido ese día (prescripción adquisitiva y sus características), es decir, el 89,74%, mientras que 8 estudiantes fallaron en su respuesta a la primera pregunta. De los 70 que contestaron correctamente la primera pregunta, sólo 6 hicieron requirieron aclaraciones sobre la diferencia entre el plazo de prescripción ordinaria y extraordinaria, en bienes muebles o inmuebles. Los 8 que no supieron contestar la primera pregunta, también de forma coherente, expusieron que no habían estado atentos, y que, en realidad, iban a estudiar “por su cuenta”. Sólo uno respondió que quería que le volvieran a explicar el contenido. Los resultados indican que la sola formulación de estas preguntas refuerza la autoestima del estudiantado: saben que nos preocupamos por su aprendizaje. Constituye una evaluación de proceso o evaluación formativa con grandes ventajas para el profesorado y para cada estudiante. Para el profesor, es una vía de control de la calidad.