La victimización sexual durante la infancia constituye un problema de elevada frecuencia en nuestro país, que puede tener graves repercusiones para el desarrollo y la salud integral de los niños, niñas y adolescentes. En este artículo se presenta una revisión del modelo europeo Barnahus, Las Casas de los Niños, para su posible implementación en nuestro país. Este pionero modelo da respuesta a las problemáticas generadas por la forma de trabajo actual en el proceso de notificación, evaluación y denuncia de la victimización sexual, reduciendo la multiplicidad de pruebas y agentes que intervienen en el caso, promoviendo la formación y coordinación entre los profesionales, eliminando la confusión que generan los diversos protocolos de actuación, protegiendo los derechos del menor y asegurando una intervención adecuada para este y su familia.