Las B Corps son empresas que conforman el cuarto sector (Sabeti, 2009) y se alinean al paradigma del triple impacto (Elkington, 1997) centrando su propósito en el cuidado de las personas y el ambiente. En 2006, surge en norteamérica la ONG BLab que lidera el movimiento global -con partners como B Lab Spain- que las impulsa, busca su regulación y desarrollo, ya que cuentan con incipientes marcos legales regulatorios. En España, distintos movimientos y lobbies están promoviendo la creación de una Ley que reconozca estas empresas con propósito (Ley BIC). Entre sus estrategias, el lobbying y las relaciones públicas (Dar, 2008; Castillo-Esparcia, 2009; Xifra, 2012; Barroso, 2021) están siendo claves para cocrear un sistema de apoyo (Baumgartner y otros, 2009 y Austen-Smith, 1993) posibilitando una actuación sistematizada y de impacto (Macnamara y Gregory, 2018; Castillo y Álvarez-Nobell, 2015) sobre distintas dimensiones de la esfera social, el sistema político, mediático e institucional y dar así respuesta a demandas sociales. La investigación parte con una descripción de las estrategias que B Lab Spain realizó en 2021 en la campaña #EmpresasConPropósito evaluando para ellos los distintos niveles de impacto previstos. Se realizó un análisis documental de las acciones y soportes; entrevistas en profundidad y un análisis de los impactos en los diarios de referencia en España y en redes sociales. En el mundo, existen menos de diez países con figura jurídica de este tipo y cada vez hay más acuerdo de la necesidad de empresas que creen valor social y ambiental más allá de beneficios económicos. La campaña de lobbying y relaciones públicas liderada en España por B Lab Spain ha logrado una importante movilización en este sentido. El impulso hacia una economía sostenible en España y el mundo está en marcha. El rol de la comunicación, como la investigación lo constata, es clave