Este extracto de publicación forma parte del apartado de proyectos ganadores de los 17 concursos, convocados para la construcción de 1.600 viviendas de protección oficial en la urbanización Soliva de Málaga capital, por el Instituto Municipal de la Vivienda del Ayuntamiento de Málaga, que actuó como promotor público. Entre los criterios de selección del jurado primaron los relacionados con el diseño, la mejora medioambiental y las medidas tendentes a la reducción de consumos energéticos y a la creación de espacios sostenibles. Dada la trascendencia de una promoción de esta envergadura en la ciudad, así como la calidad de las propuestas presentadas, dichos concursos fueron objeto de esta publicación y de una exposición celebrada en el Colegio de Arquitectos de Málaga en 2005. Con ello se pretendía presentar ante el colectivo profesional, administraciones públicas y ciudadanía las sendas por las que se pensaba debía discurrir el diseño de la vivienda pública colectiva en los nuevos desarrollos urbanos. Entre las pautas comunes de éstos destacan la implantación de las nuevas tecnologías en el espacio doméstico, su adaptabilidad como entorno laboral, la flexibilidad de usos de los ámbitos de las viviendas, su adecuación a las nuevas composiciones familiares, la eficiencia energética o la sostenibilidad medioambiental.
En este documento se recoge el acpítulo correspondiente a la obra ganadora en la parcela R-10 del SUP-T.12 Soliva Este, de los arquitectos Alberto García Marín y María Jesús García Granja, los cuales fueron adjudicatarios de los contratos de consultoría y asistencia consistentes en la redacción del Proyecto Básico y de Ejecución de 98 V.P.O., locales, aparcamientos y trasteros en dicha parcela, así como de su Dirección de Obra. En este proyecto, además de las pautas ya referidas, se cuida la sencillez del detalle y la parte pública de la vivienda, moduladora de las relaciones vecinales entre el espacio exterior y el íntimo en nuestra cultura mediterránea.