En este trabajo se incide en la necesidad y la importancia de no concebir aisladamente el inmueble industrial y su entorno agrario, pues el uno sin el otro no tienen razón de ser. A menudo en diversas actuaciones sobre el patrimonio cultural/histórico se conserva y restaura un inmueble o edificación despojándolos por completo de su contexto mueble o territorial. De la misma forma que los institutos, organizaciones y asociaciones que abogan por la protección del patrimonio andaluz cuentan con herramientas de protección de los inmuebles, dichas protecciones deberían ser extensibles a todo el contexto en el que se engloba dicha actividad socio-económica, es decir, en el caso de las fábricas de azúcar de caña por ejemplo, deben protegerse por igual los elementos inmuebles (arquitectura), muebles (maquinaria y herramientas) y territoriales (suelo agrario fuente de la materia prima).
La propuesta presentada tratará de centrarse e incidir en la importancia de esta coexistencia entre fábrica-maquinaria-suelo agrario, presentando varios ejemplos, en este caso, vinculados a la industria del azúcar de caña en el litoral este malagueño.
Para ello, se realizará una breve introducción a dicha industria y la repercusión que ésta tuvo en el litoral oriental andaluz.
En segundo lugar, mostraremos varios ejemplos de dicha industria en las que el marcado carácter agrario de la tierra y sus pobladores son el origen y esencia de dicha actividad. El estudio se centra principalmente en la zona de la Axarquía malagueña, donde pueden encontrarse numerosos ejemplos de esto, al tratarse de una zona especialmente rica y marcada por el sector y producción agrícola.
Finalmente se plantean propuestas de reutilización de dicho patrimonio para fines turísticos siempre desde la perspectiva de la sostenibilidad de la tierra y los recursos de la zona afectada, que ayuden a potenciar la economía de la zona sin hacer peligrar la integridad y la esencia del lugar en el que se realiza la intervención.