La Economía Normativa, a diferencia de su antítesis la Economía Positiva, requiere del establecimiento de una serie de premisas o juicios de valor acerca de la idoneidad del paradigma económico existente; con el objetivo primordial de establecer las políticas económicas más adecuadas para alcanzar los ideales inicialmente previstos. El aprendizaje en las asignaturas vinculadas a las disciplinas normativas de la Economía, como es el caso de la Hacienda Pública y otras de dicha área disciplinar, se puede ver influenciado por antecedentes como la percepción de la reputación del Sistema Fiscal o de la moral tributaria del estudiantado. Estos juicios de valor proceden de factores de muy diversa índole que se gestan fundamentalmente en el ámbito familiar (la tradición, el nivel educativo, la posición económica, etc.) y de la información que se deriva de los medios de comunicación, las redes sociales y -tal vez, de un modo más inconsciente- el cine. El objetivo primordial de este trabajo consiste en analizar, de forma conjunta con el alumnado y empleando los recursos cinematográficos como herramienta educativa, cómo se pueden arraigar ciertos conceptos o ideas preconcebidas sobre terminología empleada en nuestras asignaturas tales como la justicia social, la reputación de la agencia tributaria o el fraude fiscal.