La enseñanza de la historia el arte favorece la maduración intelectual y el trabajo autónomo de los alumnos a partir de pequeñas indagaciones. Ayuda al desarrollo de la sensibilidad, la empatía y la aceptación hacia aquello que es distinto a partir del trabajo de la observación, comunicación, análisis, interpretación y sistematización. Del mismo modo es una fuente primaria de gran valor que permite motivar y acercar a los alumnos a los distintos periodos de la historia, y en este sentido tanto las redes como las nuevas tecnologías pueden ser un vehículo óptimo de transmisión del conocimiento. Los niños y niñas podrán sumergirse en el aprendizaje mediante la observación, manipulación, interpretación y análisis de las imágenes a través de actividades lúdicas, así como comprender el cambio y la permanencia a través del tiempo, iniciando al alumnado de E.I. en el método histórico y en el empleo de fuentes primarias, para comprender el presente. Para ello los docentes debemos proporcionarles las herramientas necesarias para enseñar a los niños a comprender su entorno físico, temporal y social, partiendo del arte contemporáneo como herramienta holística, donde luz, perspectivas, colores, formas, trazos, etc.…, facilitarán el aprendizaje y conectarán con los contenidos de las áreas del ámbito curricular del 2º ciclo de EI: Conocimiento de sí mismo y autonomía personal, Conocimiento del entorno, y Lenguajes: Comunicación y representación. Seleccionaremos obras maestras de la pintura con valor patrimonial, por lo que deberemos actuar como mediadores para la clarificación y comunicación del nexo espiritual y material de dicho patrimonio, como actividad formativa que repercutirá en el desarrollo individual del niño a muchos niveles.