Las tecnologías ocupan gran parte de las vidas de un alto número de personas. En el Estado español, desde la enseñanza primaria, se nos inculcan competencias tecnológicas y digitales, y los smartphones acompañan casi las 24 horas del día a una considerable cifra de seres humanos, con todo lo que ello conlleva. Un alto porcentaje de quienes navegan por internet con sus dispositivos lo emplea en redes sociales, y dentro de ellas, siguiendo a estrellas de la música y atendiendo a sus vídeos en la plataforma de la multinacional, propiedad de Google, YouTube.
Tres son las multinacionales discográficas que copan el mercado, y a través de la etnografía virtual, dentro de un marco crítico, nos marcamos como objetivo conocer cuáles son los vídeos tendencia del momento, comprobando como el reggaetón es impuesto como estilo hegemónico, dentro de unas representaciones que siguen el mismo patrón, en las que el cuerpo de un determinado tipo de mujer, y no de un determinado tipo de hombre, es mostrado constantemente, hasta con planos meramente genitales, con ropajes que escasamente cubren el cuerpo, o que lo marcan absolutamente, hecho que no sucede en el caso masculino, y con unas letras orientadas a la satisfacción sexual del macho, encontrándonos con un estilo y unas perspectivas que probablemente cumplen gran parte de los parámetros de cosificación de la mujer, provocando una didáctica del machismo y del micromachismo.