El título del proyecto es Línea roja, línea azul que nace de una conversación que tuve con un amigo artista también durante la etapa de inicio del cuso. En esta conversación que manteniamos en una cafetería del muelle 1 yo le comentaba mi interés este año por desarrollar un proyecto que avanzara de algún modo hacia una síntesis de elementos en la obra en la que otorgar a la línea un papel protagonista en la producción. Durante la conversación comentábamos que sería fantástico intercambiar una obra, algo sencillo de pequeño formato. Hablando sobre esto él me decía algo así como -Sí, para que me des un papel blanco con líneas azules -y yo respondía - Bueno, pues si no te gusta te hago uno con líneas rojas. Esta anécdota en un primer momento me pareció graciosa y creo que es relevante incluirla en el proyecto ya que surgió cuando aún el proyecto estaba forjando sus primeros cimientos y sin embargo se dan en ella dos elementos que van a continuar durante todo el proceso de investigación: La línea y el color.
No obstante, aunque las piezas que componen el proyecto se desarrollan a partir de líneas y formas simples, este no trata temas únicamente formales sino que gira en torno a la búsqueda de equilibrio y armonía, de la práctica artística como ejercicio de freflexión personal e incluso terapéutico y de la idea de la pieza artística como resultado de un diálogo entre el propio artista y la obra, alejado de la narratividad y las referencias externas.
Si bien hay una etapa del proyecto donde hay una necesidad de conexión con lo cotidiano y lo externo y un interés por conectar lo ordenado y sintético con lo orgánico, incorporando la obra exenta y la intervención del espacio, el proyecto finalmente torna a los orígenes, a la obra pictórica que explora los distintos formatos y se expande fuera del formato del cuadro.