Desde diferentes disciplinas de las ciencias sociales se ha demostrado que la violencia de género constituye la parte más cruenta de la desigualdad entre hombres y mujeres en la sociedad. Las movilizaciones y manifestaciones recientes a escala internacional muestran la fortaleza y cohesión del movimiento feminista –lo que se conoce como la “Cuarta Ola”– en un contexto global que identifica las violencias sexuales y su alianza con el neocapitalismo en contra de las mujeres.
Las reivindicaciones de este movimiento pretenden incidir en la legislación, en tanto instrumento que ordena las relaciones de la ciudadanía entre sí y con el Estado. En 2018 el Parlamento andaluz aprobó la modificación de las leyes autonómicas de prevención de violencia de género y de promoción de la igualdad, así como una nueva ley de comunicación audiovisual.
La presente investigación se interesa por el estudio de este marco normativo sobre explotación sexual de las mujeres, teniendo en cuenta que es pionero respecto del resto del territorio español, y fruto de la cohesión y la fuerza del movimiento feminista y asociativo de mujeres de Andalucía, y de la interlocución que han tenido con el Gobierno y con el Parlamento de la anterior legislatura.