Este trabajo muestra la conveniencia de utilizar en el aula de lenguas extranjeras recursos lingüísticos basados en la
enseñanza de léxico de proximidad (dialectal y local) para lograr la integración social de los grupos socialmente vulnerables. Las barreras sociales que encuentran estos colectivos se agravan por el desconocimiento de las variedades lingüísticas de los países de acogida y sus funciones. El léxico de proximidad asociado a significados de pertenencia comunitaria fue considerado en un estudio anterior como una herramienta de inclusión social muy poderosa. Nuestro trabajo utiliza dos muestras de estudiantes para confirmar la eficacia del modelo. En un grupo se emplea la estrategia dialectal de manera programada y consciente; en el otro, considerado grupo de control, no se siguió este modelo. Los resultados se han medido a través de las respuestas que ambos grupos ofrecieron a las preguntas de un cuestionario de bienestar vital construido ad hoc para valorar la eficacia de la propuesta. Se confirma que el grupo donde se emplea el sistema propuesto manifiesta un mayor grado de bienestar, satisfacción y adaptación social.