Este trabajo es un recorrido por la historia del periodismo de guerra en España a través de los profesionales que la protagonizaron y protagonizan, con la finalidad de establecer los parámetros que definen y definieron esta profesión.
Los retos a los que se enfrentan los periodistas de conflictos bélicos en el siglo XXI han supuesto la alerta de académicos y profesionales del gremio ante la posible desaparición de esta figura. Las llamadas Nuevas guerras cuyo desarrollo implica una mayor dificultad para contextualizar el conflicto, la imposibilidad para acceder a la zona de confrontación -como está ocurriendo en la guerra de Siria- y una creciente amenaza que el profesional sufre en el frente de batalla- concretamente en Oriente Medio, en donde el secuestro de periodistas se ha convertido en un método financiación para las organizaciones terroristas-. Una crisis económica y profesional en la dirección de los medios reflejada en el recorte o anulación de enviados especiales a la zona de conflicto, y la dificultad que supone para los freelance costear los elementos logísticos necesarios para una cobertura informativa de calidad - transporte, equipos de protección y transmisión o traductor-. Un cambio en la metodología de su trabajo derivada de la tecnología coetánea en la que impera la inmediatez y permite el intrusismo del llamado ‘periodismo ciudadano’ son algunas de las razones que contribuyen a la suposición de la desaparición del perfil periodístico más mitificado: el reportero en zona de guerra.
La presente tesis establece una comparativa del perfil profesional del reportero de guerra a través del análisis de su práctica profesional en cuatro generaciones (constituidas en base al sistema generacional de Ortega y Gasset).