Este proyecto artístico se fundamenta en el lenguaje escultórico y consiste en la
ejecución de una instalación, con la que he seguido una investigación personal y plástica, con la
finalidad de elaborar un discurso artístico. Dicha instalación se compone de cinco partes con
una referencia común: el cuerpo humano.
El título nace de la relación existente entre el artista y la obra, del mismo acto de
creación. El artista creador, partiendo de una forma elaborada en troncos de madera, pasa a
transformarla en forma viva como es la figura humana, sufriendo una metamorfosis. La
propuesta del proceso de investigación del proyecto se realiza desde un planteamiento
participativo y dinámico como herramienta para el acto creativo y la exploración.
Las esculturas se componen de troncos de madera y terracota. Se puede decir que son
una representación figurativa de seres humanos donde se hace latente lo deforme, lo feo,
rozando lo satírico. El mito de Pigmalión o el cuento de Pinocho son claros ejemplos del ser
creador de vida, el deseo de transformar lo inerte en real; la fría piedra o el árbol cortado que se
transforma en ser humano, una metamorfosis hacia la vida.