Este capítulo analiza la situación del sector de la exhibición cinematográfica en España tras los importantes movimientos en la propiedad de las principales salas de cine desarrollados entre 2014 y 2017. Entre 2008 y 2014 los exhibidores de cine en España atraviesan una situación de crisis contundente provocada por la crisis económica, el incremento del IVA en la entrada de cine, el cambio en el consumo de contenidos audiovisuales por los espectadores y la renovación de infraestructuras
tendente a la digitalización de las salas. Ello conducirá a un estado próximo a la bancarrota en el que confluyen las pérdidas con las importantes deudas adquiridas por los grupos de exhibidores. La solución pasó por la venta de las salas propiedad
de los principales exhibidores españoles a los grandes grupos internacionales del sector.