Esta Tesis aborda la relación entre Periodismo y Justicia, pues a pesar de constituir dos campos diferenciados, pueden cruzarse en determinadas ocasiones debido a la legítima función de los medios de comunicación de informar de todo cuanto acontece, incluyendo aquellos asuntos que dependen de la administración de la Justicia. Ante un determinado proceso, la relación existente entre la Justicia y los medios informativos, que en principio debería ser positiva al ser éstos la herramienta idónea para difundir la labor desempeñada por el ente judicial, puede llegar a truncarse debido a las malas praxis asociadas a ambos campos.
Pese a la existencia de un Estado de Derecho, en ocasiones los procesos judiciales no se llevan a cabo en juzgados sino en los propios medios de comunicación. Los denominados juicios paralelos resurgen de tanto en tanto y no por ello debe pensarse que el Periodismo es una perversión.
De este panorama, unido al descrédito generalizado que padece la profesión periodística y la crítica global a los poderes, surgen diferentes ejes de investigación que componen el núcleo de esta Tesis Doctoral: qué es y cómo se desarrolla un juicio paralelo y qué praxis periodísticas pueden llegar a mermar los derechos fundamentales de los sujetos implicados en un proceso judicial, sobre todo, el derecho fundamental a la presunción de inocencia, explorando los roles que los profesionales del periodismo, a raíz de las prácticas desarrolladas, experimentan aproximando sus funciones a las de la Judicatura, Fiscalía, Policía y Abogacía.
Entre los principales objetivos que persigue esta Tesis Doctoral se encuentran la intención de profundizar sobre la relación existente entre el ámbito de la Justicia y los medios de comunicación para identificar problemas y zonas de fricción, valorar las repercusiones personales, sociales y periodísticas que se desprenden del fenómeno del juicio paralelo o, como ha quedado establecido, analizar el posible cambio de rol que experimenta el profesional del periodismo durante este fenómeno, utilizando para ello una metodología basada en el método deductivo mediante el análisis de contenido de prensa aplicado a un estudio de casos, complementado los resultados obtenidos con entrevistas a expertos en la materia. Dicho análisis de contenido, aplicado a los titulares y al material visual que acompaña las informaciones, se ha realizado mediante la aplicación del Test de Amplitud, Diversidad y Sensibilidad Humana (ADSH), ampliado con variables diseñadas que persiguen dar respuesta a las hipótesis planteadas y aportar resultados según los objetivos marcados.
Los casos objetos de estudio son el asesinato de Rocío Wanninkhof Hornos y la detención en el año 2000 de María Dolores Vázquez Mosquera como supuesta autora del crimen y posterior juicio en 2001; la Operación Poniente, desarrollada en El Ejido en el año 2009 de la que se desprende la imputación de Juan Antonio Enciso Ruíz, Francisco Javier Aguilera Callejón, Francisca Aguilera Callejón y Marien Enciso Aguilera; y la muerte de la menor Aitana Rubio García que desembocó en la detención de Diego Pastrana Vieco como supuesto autor de agresión sexual, malos tratos y homicidio en 2009.
Las conclusiones alcanzadas tras finalizar la investigación reflejan el interés periodístico que presentan los asuntos judiciales actualmente y que ha convertido al Periodismo Judicial en un campo del Periodismo con entidad que requiere de preparación y especialización por parte de los profesionales de la información que lo practican. Dicha tesis proporciona resultados tangibles que clarifican las prácticas periodísticas nocivas desarrolladas durante dicho fenómeno, así como la permuta de roles de los profesionales del periodismo, poniendo de manifiesto la necesidad de especializarse y profundizar en cuestiones de deontología profesional con el fin de evitar excesos que afecten a los derechos fundamentales de los sujetos implicados en un proceso y, en especial, al derecho fundamental a la presunción de inocencia.