OBJETIVOS. El propósito de este estudio fue validar la Escala Cognitiva de las Actividades de la Vida Diaria (AVD) en población con daño cerebral adquirido, así como determinar cuáles eran los procesos cognitivos deficitarios en la ejecución de cada actividad de la vida diaria mediante dicha escala en esta población.
METODOLOGÍA. Se seleccionó una muestra de 11 sujetos que presentaban daño cerebral adquirido, prevalentemente afectados de ictus, y una muestra aparejada en edad, sexo y años de escolarización.
Se realizó una valoración funcional mediante la Escala Cognitiva de las AVD, en la cual se medían diferentes procesos cognitivos (Esquema de memoria, Distracción, Detección de errores, Búsqueda de soluciones, Repetición de pasos, Sustitución de elementos e Inicio de la Actividad) en varias actividades de la vida diaria básicas (aseo y vestido) e instrumentales (preparación de comidas y compras). Además, se administró una batería de pruebas neuropsicológicas (memoria, atención, funciones ejecutivas y lenguaje) para la validación de dicha herramienta.
Se halló la fiabilidad de la Escala Cognitiva de las AVD mediante Alfa de Crombach. Se llevó a cabo la prueba de Correlación de Spearman para explorar la relación existente entre los diferentes procesos cognitivos de la Escala Cognitiva de las AVD con las pruebas neuropsicológicas usadas. Así mismo, se analizaron los datos haciendo una comparación de medias entre el grupo control y el grupo con daño cerebral adquirido con la prueba U Mann Whitney para determinar cuáles eran los procesos cognitivos en las actividades de la vida diaria deficitarios.
RESULTADOS. La Escala Cognitiva de las AVD demostró poseer una alta fiabilidad (Alfa de Crombach, α=.961). Se hallaron correlaciones significativas entre el proceso de Esquema de memoria en la Escala Cognitiva de las AVD y la gran mayoría de pruebas neuropsicológicas. Del mismo modo, se encontraron correlaciones significativas entre el proceso de Detección de errores y las pruebas de funciones ejecutivas y de memoria. Los resultados mostraron diferencias significativas en los procesos cognitivos de Esquema de memoria, Distracción, Detección de errores, Búsqueda de soluciones e Inicio de la Actividad, siendo inferiores las puntuaciones en el grupo con daño cerebral adquirido.
CONCLUSIONES. La Escala cognitiva de las AVD ha demostrado ser una buena herramienta para la medición de los déficits presentados en los procesos cognitivos implicados en la ejecución de las AVD, lo cual es esencial para plantear los objetivos de intervención en población con daño cerebral. Futuras líneas de investigación podrán hacer servir esta herramienta de evaluación para valorar la propia percepción del paciente en la ejecución de las AVD, y su grado de consciencia de déficits y potencialidades.