El Procurador: es una profesión libre, independiente y judicial. Actúa en la comparecencia en juicios y corresponde exclusivamente a ellos la representación de las partes salvo que la ley determine otra cosa. La función es cuidar a sus representantes a través de la cultura del proceso.
La representación técnica-procesal connota varias cosas: el lugar donde se desarrolla, las profesiones que intervienen, etc. Su intervención en los juicios es de un orden superior del que no se puede prescindir.
Le corresponde al Procurador la representación procesal y el abogado la defensa, y ambos deben ser independientes.
El Procurador desarrolla una doble función y la relación entre el procurador y su cliente es un mandato con representación.