El propósito de este análisis ha sido examinar los efectos del EP de la muestra de estudio seleccionada tanto en seco como en inmersión mediante el entrenamiento del salto vertical sin contramovimiento (SJ) y con contramovimiento (CMJ), el salto DJ30/50 (salto con una caída procedente de una altura de 30 ó 50 cm, del término inglés “drop jump”), el salto RJ10 (test de saltos reactivos, consistente en realizar 10 saltos de manera continua buscando la máxima altura en cada uno de ellos, del término inglés “repeat jump 10”) y la concentración de creatinquinasa (CK).
Desarrollo teórico
Los programas de entrenamiento se realizaron en un periodo de 6 semanas en el estudio piloto y otro de 10 semanas para permitir la realización de todos los aspectos del estudio y permitiendo el tiempo suficiente para las adaptaciones de entrenamiento potenciales. Se sometieron a un programa de entrenamiento de dos sesiones semanales en días no consecutivos y simultáneos para ambos grupos a lo largo de un total de 12 sesiones para el estudio piloto y 20 para el posterior. Con anterioridad a cada sesión de entrenamiento, los participantes realizaban un calentamiento, consistente en un periodo de activación por medio de 5 minutos de movilidad articular, en el que aparecían los movimientos activos libres localizados en las cadenas cinéticas, tanto superiores como inferiores y amplitud de movimiento, más 5 minutos de carrera continua lenta.
En conclusión,
1.- La participación en el estudio durante seis semanas de entrenamiento demuestra que ambos grupos mejoran el rendimiento, tanto en inmersión como en seco, sin que se produzcan diferencias significativas para un período de 6 semanas, tanto en el salto vertical SJ como CMJ. Teniendo el grupo EPA y EP una tendencia a seguir mejorando al cabo de seis semanas, siendo éste último período y carga de trabajo los óptimos.
2.- El EPA y EP produce a lo largo de 6 semanas mejoras no significativas en el rendimiento del salto vertical, siendo el EP una mejor opción para la obtención de mejores valores tras un período de 10 semanas.
3.- A partir de los 350 saltos por sesión se reducen los resultados obtenidos en lugar de incrementarlos.
4.- El EP obtuvo mejoras significativas en las variables analizadas (RJ10: 97/3/0; DJ30: 97/3/0; DJ50: 100/0/0). Sin embargo, los saltos en profundidad no obtienen mejores resultados en los EPA tras 10 semanas de entrenamiento (RJ10: 50/42/9; DJ30: 83/17/0; DJ50: 63/36/1), debido, probablemente, a la especificidad del salto y la inhibición del reflejo miotático así como al retardo de la velocidad del CEA.
5.- Ambos grupos de entrenamiento mostraron curiosamente una mayor concentración de CK en relación al test intermedio y final, a pesar de aumentar el volumen de entrenamiento de 300 a 500 saltos (83,3%) por ciclo de sesión. Sin embargo, el EP parece producir un daño muscular mayor que el EPA (15,0% frente a 3,2%), siendo mayor la rigidez muscular evaluada.